Esta noche es Halloween, también llamada Noche de Brujas, festividad americana en la que las historias de miedo y las calabazas terroríficas cobran protagonismo. Y, por qué no, noche también de los súcubos o demonios en forma de mujer. Según cuentan las leyendas medievales los súcubos eran seres de gran belleza y sensualidad que se les aparecían a los hombres jóvenes por las noches para copular con ellos. El hecho de que sus víctimas fueran mayoritariamente monjes y el carácter demoníaco que se le daba a esta figura de mujer no era de extrañar en una época donde la Iglesia era la ley y el sexo estaba prohibido. De esta forma se le dio una explicación a las poluciones y erecciones nocturnas de los hombres de Dios, para los cuales el sexo ha sido desde siempre sinónimo de pecado.
Con el tiempo los súcubos pasaron a ser sinónimos de prostitutas, y la leyenda cayó al olvido, pero esta noche en la que se encienden velas negras y se cuentan historias de terror quién sabe quien podría venir a hacerte una visita de madrugada… por si acaso se recomienda meterse en la cama bien aseado y con un pijama sexy.
